domingo, 17 de marzo de 2013

¿Todo lo bueno se acaba?

¡Qué día más intenso! Después de conseguir levantar a los chicos, fuimos a desayunar. ¡Hoy tocaron churros! Además de los dulces que también nos habían regalado las monjas...
Con las pilas ya cargadas, tras la agotadora jornada de ayer, tuvimos una "reunión" para "recoger" lo que han supuesto estos días. Era necesario hacer una evaluación. Esta convivencia ha supuesto un gran esfuerzo para las familias, para el colegio y para las personas que nos han acompañado. Y la conclusión es ¡SÍ! ¡Merece la pena!
Hicieron una breve reflexión personal de la que luego cada uno compartió lo que quiso. Una buena costumbre esto de pararse a pensar de vez en cuando...
A continuación participamos en la celebración de la Eucaristía a las 11,00 horas, leyendo nuestros chicos la monición de entrada, la segunda lectura y las peticiones.
Algunos no se resistieron a llevar unos dulces a sus familias... Y, tras despedirnos de las Madres Agustinas y agradecerles su hospitalidad, nos dispusimos a visitar los lugares más significativos de Fregenal de la Sierra, acompañado de sus fotos respectivas...
Y, después de comer, a "recoger los bártulos" y para casa.
Todo lo bueno se acaba... ¡No! Esto no ha hecho más que empezar. Volvemos cargados de experiencias y cositas buenas que han dejado una huella que recordaremos siempre.
¡Hasta la próxima!

sábado, 16 de marzo de 2013

Convivencia con los chicos de la ESO

Parece mentira que hayan pasado solo poco más de 24 horas.
Ayer salíamos de Coslada pasadas las 9,30 y después de una parada a las dos horas, continuamos nuestro camino para llegar a Mérida a las 14,30, donde comimos y comenzamos la visita a las 15,00 del Anfiteatro, Teatro, letrinas, Templo de Diana…
Después volvimos al autobús y en hora y media llegábamos a Fregenal de la Sierra.
Pudimos conocer el taller del alfarero, su exposición y cómo se hacía todo aquello que estábamos viendo.
Fuimos a dejar nuestras cosas al lugar donde nos íbamos a alojar y salimos a cenar a una plaza. Terminamos el día dando un paseo por el pueblo. Y, tras el primer turno de duchas, intentamos dormir, porque, a pesar del largo día y el cansancio acumulado, la risa contagiosa a cada instante volvía a aparecer… Esta edad…